Iglesia y Gobierno unidos, dieron gracias a Dios…

Con una mañana fría y lluviosa a las 8:30 a.m. el Presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón acompañado de su esposa, María Clemencia Rodríguez y sus hijos, ingresaron a la Catedral Primada de Colombia donde fueron recibidos  y bendecidos con el sacramental del agua bendita, por el párroco; Monseñor Álvaro Vidales Bedoya , el diácono Fredy Galvis y el capellán del batallón Guardia Presidencial, José Arnoldo Rincón.

Acto seguido a su ingreso los saludos protocolarios a los asistentes no se hicieron esperar, el cuerpo diplomático acreditado en Colombia, Ministros, ex presidentes de la República, altos funcionarios del gobierno nacional, altos mandos de las fuerzas militares y de la policía e invitados especiales; todos ellos, dieron la bienvenida al primer mandatario y estuvieron atentos  a la celebración.

Momento de plegaria por la paz

Oficio religioso que estuvo presidido por el excelentísimo monseñor Fabio Suescún, obispo castrense de Colombia, monseñor  Álvaro Vidales, su excelencia el señor nuncio apostólico Ettore Balestrero, el maestro de ceremonias de la catedral primada, Gonzálo Sandoval y demás colaboradores y diáconos de la catedral.

 La primera lectura  del libro de Isaías ( 43,16-21) como es de costumbre, estuvo a cargo del Señor Presiente de la República, Juan Manuel Santos. Luego se leyó el  El salmo 23 (22) y la lectura del Santo Evangelio Según San Juan ( 20, 19-31)

Monseñor. Fabio Suescún ,resaltó en su homilía: “Estamos convocados a trabajar juntos. Alguien afirmaba que “si no luchamos todos unidos seremos destruidos por separado”.

Estamos juntos inventando la paz, y lo estamos haciendo dándole contornos definidos al Bien Común. Nunca antes se soñó la “Buena Paz”; siempre se pensó en ella a veces equivocando caminos; otras veces abandonando los emprendidos; otras permitiendo que el pesimismo nos paralizara; pero ahora se hacía necesario dar un paso definitivo para que “aconteciera” y poder cuidarla.

Momento de sembrar …

“Estamos hoy viendo nacer la Paz con la certeza y el convencimiento que la verdad para unos es, ahora, sembrar y para otros, en el mediano por venir, será cosechar.

Hemos de saber luchar por la paz. El evangelio de Juan nos presenta la “clave” del momento histórico que vivimos. El Señor resucita y su mensaje es solo uno e inconfundible: “Paz a vosotros”. Impresiona el “Señor de la Resurrección” cuando luego de su saludo muestra sus cicatrices, sus heridas de la crucifixión.

Es cierto; hoy todos los colombianos podemos también mostrar nuestras heridas pero no hemos de detenernos tan solo en el lamento sino salir hacia adelante aceptando que la misión encomendada es ser “mensajeros de la paz” y abrirnos al Espíritu Santo para poder cumplirla."

Canto de súplica al Señor

Antes de finalizar, monseñor Suescún recalcó : “El Te Deum que hemos cantado en este día de gracia del 20 de julio pide a Dios que venga en nuestra ayuda y que su misericordia nos acoja. En este Año Santo de la Misericordia que nos llevan al perdón y a la reconciliación pongámonos en las manos de Dios y renovemos el compromiso de “no permitir ,como lo expresó claramente el Papa Francisco ,otro fracaso más en este camino de paz y de reconciliación”.

A continuación los invitamos a escuchar la homilia completa del  excelentísimo monseñor Fabio Suescún, obispo castrense de Colombia:

El himno Nacional de la República de Colombia estuvo interpretado por la banda de músicos del batallón de infantería Guardia presidencial.

El canto del Te Deum  en acción de gracias por el ducentésimo sexto aniversario (CCVI) del grito de la independecia de Colombia estuvo interpretado por el coro del Ejército nacional. A continuación el audio completo del Te Deum

Galeria fotográfica ceremonia litúrgica Te Deum, a continuación: